OPINIÓN | Alan Sayago Ramírez * | 17 de febrero, 2021 |
Estar pensando que se puede cambiar a Xalapa tal vez puede ser para algunos una idea utópica y muy posiblemente inalcanzable, enmarcado por un selecto grupo de personas o familias, en su mayoría estas personas ya contribuyeron en el desarrollo y progreso de la ciudad, y donde el espacio para la innovación y el mejoramiento de los problemas que frecuentemente afrontamos es muy reducido.
Xalapa enfrentan una severa crisis de liderazgo que ha generado un ciclo perjudicial: el ascenso de políticos incapaces de vislumbrar el impacto de sus decisiones y omisiones en la sociedad Xalapeña, y como efecto, la claudicación de ciudadanos talentosos, con el potencial de cambiar la capital del Estado; personajes con conocimiento, prestigio y experiencia, pero que desmotivados por lo sucio que es la política xalapeña, deciden apagar la luz y vivir en el anonimato.
Claro, hay otros empecinados que como los salmones luchan contra corriente. Más que conservadores o liberales, se trata de líderes reconstruccionistas, que optan por erradicar la apatía y la indiferencia. Son los líderes que la Atenas Veracruzana necesita.
Esto me hace recordar el libro de Anthony McCarten llamado “Las horas más oscuras. Cómo Winston Churchill salvó al mundo del abismo”, donde se analiza los períodos más críticos del Winston en su papel como líder político de la Gran Bretaña que abarca del 7 de mayo al 4 de junio de 1940. En ese momento Churchill vivía las horas más tensas en donde tuvo la enorme responsabilidad de decidir el destino de Inglaterra durante la Segunda Guerra Mundial.
En estos momentos nuestra capital requiere un líder como Winston Churchill, comprometido con la ciudad de las flores y que vea a la ciudad desde una nueva óptica; que trace un plan basado en las nuevas tecnologías. Un líder que sepa cómo funciona Xalapa, es decir, que conozca sus fortalezas, y entienda sus áreas de oportunidad; que evite la disrupción, que ame su tierra y reconozca su identidad.
Hablar de lo que hizo Winston Leonard Spencer Churchill y trasladarlo a nuestros tiempos es difícil, el vivo ejemplo es cuando visitas las colonias de esta ciudad y te responden, que no creen en la política xalapeña, porque siempre aparecen los mismos y ver a jóvenes que tienen ganas de hacer algo por la ciudad, pero no les dan las oportunidades. es cuando se extraña a el liderazgo como Churchill y surge la pregunta ¿Se necesitan hoy líderes como él para atender el laberinto del Covid-19, la lucha contra la inseguridad que se vive en la ciudad, la irrupción de los populismos o la crisis que vive por los malos gobiernos?.
Winston Churchill es considerado por muchos el líder y hombre de Estado más importante del siglo XX que llevó a la victoria a Reino Unido a través de un liderazgo efectivo, hoy Xalapa necesita líderes inteligentes, con autodisciplina, emocionalmente sanos (no importa la edad), que hagan equipo a raíz de sus cualidades.
Gente capaz de digerir la crítica, de reconocer errores y darle la bienvenida a diferentes formas de pensamiento. Considero que el temple y la frialdad en la toma decisiones son características imprescindibles. Hoy en día necesitamos líderes que transformen los tropiezos en madurez y los errores en oportunidades.
No encontré la cura, y tampoco es la receta secreta en la que Xalapa podrá aliviar todos sus malestares, pero si es una crítica de lo que requiere el líder, el cual se debe conducir con respeto, humildad; que sean defensores de la dignidad, y que entiendan que en la vida todos somos alumnos y maestros. Creo que no es posible ser un buen líder sin un espíritu generoso.
La ciudad de Xalapa debe pensar como Winston Churchill, donde la derrota no era una opción (no podemos irnos por el menos peor), el ciudadano debe tener un firme espíritu de lucha (salir este 6 de junio a participar) donde no les dejen a algunos cuantos el destino de la ciudad y el líder que aspire gobernar Xalapa debe hacer de la política un arte.
Alan Sayago Ramírez
Activista Social, licenciado en Derecho, y Maestro en política y gestión pública.
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